El uso de la bicicleta urbana ha ganado popularidad en muchas ciudades de Suramérica, no solo como una alternativa de transporte ecológica, sino también como una solución efectiva para evitar el tráfico, promover la actividad física y reducir las emisiones de carbono.
Bogotá cuenta con más de 600 kilómetros de ciclorrutas permanentes, siendo una de las redes más grandes de América Latina, a las que suma cada domingo y días feriados las a Ciclovías, que utiliza vías principales para uso exclusivo de ciclistas y peatones por algunas horas. Gracias a las reformas urbanas que hizo en entonces alcalde de Buenos Aires, Mauricio Macri, hoy la ciudad cuenta con más de 250 kilómetros de carriles exclusivos para bicicletas, integrados con el sistema de transporte público y estaciones de bicicletas compartidas. Le sigue en kilómetros Santiago de Chile con más de 200 kilómetros de carriles bici, muchos de los cuales están conectados a estaciones de transporte público, promoviendo la intermodalidad. Le sigue Lima con una infraestructura de 180 kilómetros de ciclorrutas, integrando espacios para bicicletas en zonas céntricas y áreas residenciales.
Este crecimiento ha impulsado los sistemas extendidos de ciclorrutas, ofreciendo un entorno más seguro y accesible para los ciclistas. Sin embargo, circular en bicicleta en una ciudad tiene sus desafíos y requiere prestar atención a ciertos aspectos clave como el diseño adecuado de la bicicleta, los accesorios de seguridad, las normas de circulación, y el cuidado físico del ciclista.
Cuando piense en adquirir su bicicleta urbana debe priorizar la comodidad y funcionalidad para adaptarse a los trayectos en la ciudad. Son aspectos claves la facilidad de subir y bajar de la bicicleta con rapidez, especialmente en entornos urbanos donde los ciclistas pueden detenerse con frecuencia en semáforos o intersecciones. Las bicicletas con cuadros de diseño más recto o bajo son más fáciles de manejar en estos escenarios.
Buena parte de la comodidad y una mejor visión del entorno es el uso de manubrio en posición alta, que además disminuye la tensión en la espalda, y es ideal para recorridos más largos. A diferencia de las bicis de ruta o competencia, lo mejor en la ciudad son los neumáticos más anchos, porque absorben mejor los impactos, brindando mayor estabilidad y comodidad al ciclista. Las vías urbanas y las ciclorrutas pueden presentar baches o irregularidades en el asfalto.
Los sistemas de cambios y platos múltiples se han considerado como parte inherente de las bicis deportivas, pero las urbanas las requieren para facilitar el pedaleo en pendientes o calles con diferentes niveles de inclinación. Esto es especialmente útil en ciudades con topografía variada. Es necesario entender su funcionamiento, las relaciones de los platos y piñones y hacerla prácticas cotidianas para pedalear mejor, más cómodo y ahorrar energía.
Las bicis más convencionales siempre venían con guardabarros, eran parte de su diseño, solo las catalogadas como deportiva no los llevaba. Los guardabarros, que hoy en su mayoría son de plástico, protegen al ciclista de salpicaduras de agua o lodo, esenciales en días de lluvia. El portaequipajes trasero es ideal para transportar mochilas o bolsas sin necesidad de cargar peso en la espalda.
El Casco es el accesorio de seguridad más importante, debe ajustarse correctamente y cumplir con normativas de seguridad, como las certificaciones EN 1078 o CPSC en Suramérica. Muchos ciclistas prescinde de el, pero cuando se ven involucrados en una caída, se dan cuenta de su imperiosa utilidad. Busque el mejor diseño para usted, y siempre llévelo puesto cuando circule en las ciclorrutas. Y hablando de seguridad, su bici debe llevar siempre luces y reflectores, tanto adelante como atrás, especialmente cuando se transita de noche o en condiciones de baja visibilidad. Los reflectores en los pedales y ruedas aumentan la visibilidad del ciclista ante otros conductores. Si lleva cintas tobilleras para evitar el daño de pantalones, busque que sean en materiales reflectantes. Y no pueden falta el timbre o bocina que en algunas ciudades, su uso es obligatorio como parte de las normas de tránsito.
Algunos tienen bicicletas plegables, lo que facilita poderlas guardar en cualquier lugar, por ejemplo junto a su escritorio en la oficina, si no es así, siempre lleva un candado de seguridad, aún dejándolas en bicicleteros públicos. Un buen candado de acero endurecido en forma de “U” es indispensable para proteger la bicicleta cuando está estacionada.
Cuando se llega a su destino, algunas personas pueden hacer uso de duchas y se pueden arreglar para el trabajo. Otros por el contrario no tienen esos servicios, por lo tanto la ropa adecuada ligera y transpirable, al igual que los zapatos de suelas firmes que permitan un buen apoyo sobre los pedales, hace necesario aprender a pedalear para no sudar en exceso y pasar incómodo el resto del día. En la realidad es una técnica que va acompañada con el buen uso de los cambios.
Tanto antes de iniciar la ruta como al finalizar, siempre realicen estiramientos para prevenir lesiones y en el caso de personas mayores, evitar la perdida de fuerza en las piernas. Por más que considere que ha hecho un ejercicio adecuado, debe estirar, no hacerlo lo afecta de forma sustancial. Haga estiramientos de cuádriceps e isquiotibiales para preparar los músculos principales utilizados en el pedaleo. Estirar la espalda para evitar tensiones musculares, sobre todo si el trayecto incluye inclinaciones. Al mantener el manillar, los brazos y hombros están constantemente en tensión, por lo que un estiramiento de esta zona ayuda a prevenir molestias.
Cuando entiende el movimiento del pedaleo se da cuenta que puede generar rigidez en las caderas, por lo que es esencial estirar estos músculo, al igual la sobrecarga de los músculos de las pantorrillas, por lo que un estiramiento adecuado ayuda a reducir esa tensión.
En trayectos urbanos, aunque no se trate de una actividad extrema, es fundamental mantenerse bien hidratado. El ciclismo genera sudoración, y perder líquidos puede afectar el rendimiento físico y la concentración. Hidratarse antes de empezar a pedalear ayuda a prevenir la deshidratación, especialmente en días calurosos.
Siempre lleve en su cicla su botella deportiva de agua, no es necesario esperar a tener sed para beber agua. Se recomienda tomar pequeños sorbos cada 15 o 20 minutos. Evite las bebidas azucaradas ya que pueden provocar un rápido aumento y posterior caída de energía. Las bebidas isotónicas pueden ser útiles en recorridos largos o en días muy calurosos, pero el agua fresca siempre es una alternativa eficiente y sana.
La sensación de libertad y de poder ir a cualquier lugar también conlleva responsabilidades ante los demás usuarios de las vías. Cumplir las normas de circulación para ciclistas en ciudades son esenciales para evitar accidentes y garantizar una convivencia armónica con otros actores viales. Los ciclistas deben circular por la derecha, siguiendo el flujo de los vehículos motorizados. En las ciclorrutas, deben respetar la señalización y mantenerse dentro de los carriles asignados. Se deben respetar las señales de tránsito, incluyendo semáforos y señales de pare. Utilice las manos para señalizar giros y hacia qué dirección lo hará, es esencial para que otros conductores y peatones sepan tus intenciones.
Salvo en casos donde haya una ciclorruta designada, las aceras son de uso exclusivo para peatones y siempre evite acercarse demasiado a vehículos motorizados o a otros ciclistas, es fundamental para reaccionar a tiempo ante imprevistos. Nunca se haga al lado de camiones o vehículos grandes, fácilmente puede ser parte de un accidente fatal por temas de física elemental.
Si bien es un vehículo personal, cuando lo comparta con un pasajero, o le instale carritos de remolque, o sea un diseño en tándem, la seguridad es compartida, cumplan siempre con las normas de seguridad y siempre, antes de salir a rodar, determine la ciclorruta que va a usar, reconozca el estado en general y las características de la ruta, que puede incluir elevaciones, puentes, cruces con vías de alto tránsito vehicular, que por sus motorización contamina el aire que usted requiere para seguir pedaleando. Si es del caso, utilice un tapabocas con filtros de carbón activado Dinámico que tiene excelente absorción de contaminantes provenientes de los motores de combustión.
Disfrute diariamente de su bici para vivir mejor, con más energía y aproveche las infraestructuras que ofrecen nuestras ciudades, su uso constante hace que las administraciones consideren su extensión y mantenimiento permanente, además de ayudar a un mejor diseño urbano con más verde, con más vida.