Las noticias del dìa a dìa son cada vez màs preocupante, porque las estamos viviendo y es nuestra realidad. El poder desde siempre se ha mostrado indolente ante el dolor y necesidades que considera ajenas y que son prescindibles, porque quien la vive tambièn lo es.
La persecuciòn a los migrantes legales o ilegales en USA nos muestran que solo importa una visiòn, en un mundo unipolar, autosufciente y que decide quien vive y quién no en su territorio. Si eres de los supuestos afortunados que vas porque tienes estudios superiores, porque tu perfil le interesa al sistema y cabes en la màquina de producciòn eres aceptado, de lo contrario aquellos que llegan de forma irregular tendràn que pasar por todas las malas experiencias que bien pueda considerar.
La mayorìa van con la única opciòn que encuentran para salir de situaciones lamentables. En el caso de Colombia hay que entender que es un paìs que no termina una guerra interna, que en la realidad lleva màs de doscientos años y que dadas las noticias recientes no terminarà pronto. El costo social sigue siendo muy alto y la estabilidad del paìs continiuarà como parte de la incertidumbre habitual en la que hacemos la vida.
Cada paìs de latinoamèrica tiene sus guerras y desequilibrios polìticos. Cuando se suman encontramos que el poder norteamericano de una o de otra forma ha mantenido estos paises en crisis por muchísimas razones. A eso se suma malas administraciones, corrupciòn a todos lo niveles, dictaduras aberrantes, desequilibrios sociales y econòmicos que marcan la sociedad entre una mayoría que vive en miseria y pobreza y otros que viven al estilo norteamericano y soñando con ello. Romper ese cìrculo vicioso no se ha logrado en ningùn paìs del continente. Ni en apuestas liberales, comunista o socialistas, en general es un continente bastante conservador y que de alguna forma busca mantener los privilegios ya establecidos.
No importa la lìnea polìtica que se imponga, el resultado siempre es el mismo. El costo social y humano cada vez serà mayor. Revise usted la historia de cada paìs y se darà cuenta que se vuelve a lo mismo. Aùn las dictaduras como la de Nicaragua, el poder se vuelve presa de su propio egoísmo y vanidad. No hay cambios reales para que las poblaciones vivan mejor.
Las migraciones intercontinentales han sido un fenómeno constante a lo largo de la historia, impulsado por diversos factores sociales, económicos, políticos y culturales. En los siglos XIX y XX, las migraciones adquirieron una magnitud global, transformando las sociedades receptoras y las de los países de origen.
Uno de los episodios más significativos de expulsión de migrantes en el siglo XX fue la creación del Estado de Israel y el consiguiente éxodo de palestinos. La guerra árabe-israelí de 1948. El siglo XXI ha visto un aumento dramático en los flujos migratorios debido a las guerras, las persecuciones y las crisis humanitarias en el Medio Oriente, África y Asia. Igual en Europa, la desapariciòn de la URSS animò a muchos europeos orientales buscar a la Europa rica de occidentes un lugar para vivir.
Ser migrante, detràs del sueño americano, o europeo y quizàs con el tiempo asiático, nos debe inquietar ante la pérdida de talento humano, ante el maltrato, explotaciòn, violaciòn y ene cantidad de vejaciones a las que se ven expuestos aquellos que se atreven a romper con su triste y patètica realidad. Vidas sin futuro, muy complicadas, víctimas de sociedades que no han logrado el equilibrio justo y donde las personas pueden desarrollar su talento y hacer una vida productiva para todos.
Quizàs para los déspotas de turno lo mejor serìa desaparecer o sacar del planeta a los migrantes que tanto estorbo les ocasiona. Pero aquì hay un punto a considerar, estos poderosos son de orígenes migrantes cuyos antecesores escaparon de la Europa muerta de hambre, del Asia destruida y aplastada por los imperios occidentales y de territorios en guerras en donde era imposible vivir y llevar una vida.
Hoy se desprecia a Latinoemèrica, pero siempre estan atentos a buscar el recurso natural que pueden explotar y apropiarse de el, o que ventaja competitiva le pueden sacar, siempre en perjuicio de sus habitantes. La historia asì lo demuestra. El gobierno norteamericano seguirá imponiendo su fuerza y su visiòn de purificaciòn de la poblaciòn y la fuerza, la arbitrariedad y el abuso seguirán siendo las pauta en estos procedimiento de búsqueda, arresto y expulsiòn.
Las migraciones, tanto voluntarias como forzadas, seguirán siendo un aspecto crucial en la configuración de las sociedades del presente y del futuro. Es esencial que los países y las organizaciones internacionales colaboren para gestionar estos flujos de manera humana, respetando los derechos de los migrantes y refugiados, y garantizando su bienestar y su integración en las sociedades receptoras. Y un punto adicional, pronto llegaràn las migraciones causadas directamente por la Crisis Climàtica, la destrucciòn de territorios habitados, la falta de alimentos, agua potable y medios de subsistencia. ¿Què harà el poder ante estas realidades planetarias?
Por ahora desde USA su presidente en su discurso de posesión se sostiene que «Se detendrá inmediatamente toda entrada ilegal, y comenzaremos el proceso de devolver a millones y millones de extranjeros criminales a los lugares de donde vinieron». Lo de criminal es bastante discutible, quizàs son màs víctimas de realidades que claman justicia pero solo dan muerte de muchas formas y no solo de forma física.